Pintura acrílica para uñas
En las uñas, al estar cerca de la vista, es más fácil observar y detectar imperfecciones, ya sea en el esmalte o por cualquier anomalía que afecte a su salud, por lo que podemos actuar y solucionarlo más rápidamente.
A diferencia de las manos, que están descubiertas todo el tiempo y en contacto con el aire, las tartas se encierran con zapatos o calcetines, lo que provoca una mayor sudoración. Un hábitat perfecto para el desarrollo de hongos y otras infecciones.
Muchos pacientes desconocen que abusar del esmalte, sobre todo de los semipermanentes y permanentes (los que duran más), puede tener consecuencias para la salud de nuestras uñas. Pero… ¿por qué? ¿Qué ocurre con las uñas?
La respuesta Es simple: cuando nos pintamos las uñas, recubrimos su superficie con un producto químico (que en muchos casos contiene ciertas toxinas) que puede dificultar la creación natural de queratina.
Uñas de acrílico
Es importante saber que el gel, también llamado “gel UV”, sólo se endurece si se utiliza la lámpara UV para secarlo. El gel puede sustituir por completo a las uñas naturales o servir de trampolín para las cápsulas, que se aplican directamente sobre ellas.
Aplica una fina capa de gel en toda la superficie de las uñas, estírala si es necesario para que quede uniforme y sécala bajo la lámpara UV durante tres minutos. Cuando las uñas estén secas, aplica una nueva capa y deja secar unos minutos, de nuevo bajo la lámpara UV.
Pintura para uñas
También los clásicos azules vaqueros se reinventan con tonos que van del azul hielo al azul pavo real. El gris industrial y el acero brillante se unen para inspirar tonos bronce con o sin reflejos.
También puedes optar por esmaltar tus uñas con un color básico como el rojo y sus variantes (frambuesa, burdeos, etc.). Este tono clásico es atemporal y combinará con todos tus conjuntos, tanto de día como de noche.
El caqui, el amarillo mostaza o el gris quedarán perfectamente realzados con un esmalte de uñas fucsia o burdeos. Por último, los colores neutros como el gris, el marrón o el negro tendrán la ventaja de combinar con un buen número de conjuntos, desde los más básicos hasta los más coloridos.
También puedes combinar el color de tu esmalte de uñas con un accesorio como una joya, un pañuelo o un bolso. Este recordatorio de color creará cierta cohesión en tu atuendo.
Uñas de leopardo
También los clásicos azules vaqueros se reinventan con tonos que van del azul hielo al azul pavo real. El gris industrial y el acero brillante se unen para inspirar tonos bronce con o sin reflejos.
También puedes optar por esmaltar tus uñas con un color básico como el rojo y sus variantes (frambuesa, burdeos, etc.). Este tono clásico es atemporal y combinará con todos tus conjuntos, tanto de día como de noche.
El caqui, el amarillo mostaza o el gris quedarán perfectamente realzados con un esmalte de uñas fucsia o burdeos. Por último, los colores neutros como el gris, el marrón o el negro tendrán la ventaja de combinar con un buen número de conjuntos, desde los más básicos hasta los más coloridos.
También puedes combinar el color de tu esmalte de uñas con un accesorio como una joya, un pañuelo o un bolso. Este recordatorio de color creará cierta cohesión en tu atuendo.